El origen de la ciudad de Ourense está estrechamente vinculado a la existencia de manantiales de aguas termales que, con los años, se han convertido en una de las señas de identidad de la ciudad.
A su paso por la capital, el río, antaño rico en depósitos de oro, dibuja un paisaje de orillas donde aguas fluviales y termales conviven en un entorno natural a solo unos pasos del centro.
A principios del nuevo siglo, recogiendo el testigo de la cultura del baño al aire libre arraigada entre los ourensanos, el Concello de Ourense, encaró un importante reto y encargó importar a Ourense, hasta las mismas orillas del Miño, la filosofía y arquitectura de la tradición termal japonesa basada en la filosofía Zen, que busca la relajación física y mental en contacto directo con la naturaleza; fue el año 2001, con la consecución de las Termas Chavasqueira, un complejo construido en piedra y madera de pino que recrea los espacios tradicionales de los baños japoneses y que para su gestión fue sacada a concurso, que recayó en la empresa Ibernisha.
jueves, 14 de abril de 2016
Iberinsha o la filosofía de los balnearios Zen en el Miño
Publicado en La Región, 05/04/2016:
Suscribirse a:
Entradas (Atom)